Bueno, después de un fin de semana bien movidito con el
Sonisphere, del cual haremos una crítica próximamente explicando los puntos
fuertes y sus fallos, aquí otro disco más, pasando a una nueva década donde
muchos de los grupos que más publico aclama hoy en día surgieron.
Como no, le toca el turno a Iron Maiden. No hace falta mucha
introducción para este grupo, la gran mayoría de lectores del blog sabrán de
sobras sus discos, sus canciones más míticas y demás datos, así que vayamos a
lo que interesa, el disco que hizo de 1980 un año para recordar. No olvidemos otros
discos como Back in Black o Blizzard of Ozz salieron este mismo año, así que
vaya añito se antojaba…
Iron Maiden, fue el álbum debut de la banda. Con una duración
media, unos 40 min. aprox., tenemos temas míticos como Prowler, Running Free o
la genial Phantom of the Opera. Una de las variaciones que tiene este disco en
comparación a la larga carrera de Maiden, es que el cantante fue Paul Di’Anno,
que aunque hizo un gran papel en el grupo, Maiden es sobreconocido
esencialmente con Bruce Dickinson, el actual cantante.
El disco comienza con Prowler, una de las canciones mas
aclamadas por los fans, y que incluso hoy en día no suele faltar en cualquier
concierto de Maiden. La voz de Di’Anno junto a las guitarra de Dave Murray el
bajo de Steve Harris, Clive Burr a la batería y Dennis Straton acompañando en
las voces y segunda guitarra crean una canción rápida y con algún cambio de
ritmo, en un estilo que no se veía por entonces mezclando un punk veloz con un
metal joven.
Pasamos a Remember Tomorrow, en gran parte canción lenta,
pero con algunos cambios y un largo solo de guitarra que servirá para llegar a
Running Free, personalmente una de las canciones con más “gancho” de Maiden. Nada
mas comenzar, la batería nos introduce en un mundo lleno de energía, que cuando
comienzan a cantar nos obliga a levantar los cuernos en alto ante tal obra de
arte. El ritmo no para ni un segundo a lo largo de la canción y de principio a
fin realmente nos sentimos corriendo libres, con Maiden sonando de fondo.
Y llegamos a Phantom of the Opera, una de las mejores
canciones del CD sino la mejor. Durante los 7 minutos que dura una gran
composición general muestra que este grupo va a tener futuro y que el heavy
metal puede crecer a grandes pasos. Uno de los mejores solos del grupo, y un
final con fuerza refuerzan el porque de que sea considerada una de las grandes
canciones de Maiden. Le toca a Transylvania, un tema instrumental que nos da un
pequeño descanso para disfrutar de guitarras llenas de energía y riffs
pegadizos que nos harán mover la cabeza al ritmo de ellas.
Con Strange World toda la energía que desprende el grupo se
calma. Esta bonita balada nos habla sobre el mundo y la sociedad rara que nunca
envejece pero que se está feliz en él.
En Charlotte The Harlotte vuelven los ánimos y aunque
contiene varios cambios durante la canción, no la consideraríamos balada como
la anterior. En esta canción nos habla de la historia de la prostituta, que
continuará en otras 3 canciones más adelante.
Y para terminar con el CD, la mejor forma es hacerlo con la canción
que le da tanto título al disco como a la banda, además esta canción es
comúnmente tocada en todas las giras del grupo
Ahora ya hemos llegado al final de este CD, que
probablemente no sea el mejor de Maiden, viendo joyas como Killers, The Number
of the beast o Piece of Mind pero fue el inicio de una banda que la gran
mayoría de metaleros llevan en su corazón, y por tanto se le debe recordar con
mucho cariño. ¡VIVA MAIDEN!